CONOZCA LOS PRINCIPIOS EN LOS CUALES SE BASA
UNA ALIMENTACIÓN SALUDABLE
Los alimentos, además de influir en el crecimiento y desarrollo de los niños, determinan en forma importante la calidad de vida de las personas.
Una nutrición sana y estilos de vida saludables evitan la obesidad, diabetes, más de la mitad de las muertes por enfermedades cardiovasculares y un tercio de las muertes por cáncer.
Para lograr una nutrición óptima es importante aprender a conocer y seleccionar los alimentos beneficiosos y descartar aquellos dañinos que sólo aportan calorías vacías, y que muchas veces son ofrecidos con atractivas propagandas y premios en los medios de comunicación.
Nuestro país es privilegiado por la variedad de frutas y verduras que produce, pero desgraciadamente no siempre forman parte de la dieta de los niños, siendo reemplazadas por productos industriales con alto porcentaje de grasas saturadas (que aumentan el colesterol), colorantes y preservantes, dañinos para la salud.
Una alimentación sana se basa en una alimentación variada que permita proporcionar al organismo todos los nutrientes en la proporción debida. La proporción ideal corresponde a 25% proteínas, 55% carbohidratos y 20% grasas, además vitaminas y minerales.
Los hidratos de carbono o carbohidratos: Constituyen la mayor fuente de energía, se encuentran en cereales, legumbres, papas, harinas, frutas, azucares refinados, bebidas alcohólicas.
Grasas: Aportan ácidos grasos esenciales y vitaminas liposolubles. Las grasas de origen animal son fuente importante de colesterol. Se encuentran en carnes, leche y derivados, yema de huevo, aceites vegetales.
Proteínas: Aportan a la estructura, permiten el crecimiento, desarrollo y forman parte importante del funcionamiento corporal. Se encuentran en carnes, huevo, leche y derivados, legumbres cereales, hortalizas.
Vitaminas: Son importantes en procesos bioquímicos y ayudan a evitar enfermedades. Si se consumen en exceso también pueden producir alteraciones. Se encuentran en frutas, verduras, legumbres, cereales, pescados, carnes, huevos.
Minerales: Participan en procesos biológicos vitales. Se encuentran en todos los alimentos.
Las recomendaciones para una alimentación saludable incluyen:
- Consumir diferentes tipos de alimentos durante el día.
- Aumentar el consumo de verduras, frutas y legumbres.
- Usar de preferencia aceites vegetales y limitar las grasas de origen animal (presentes en carnes rojas y lácteos).
- Preferir carnes como pescado, pavo o pollo.
- Aumentar el consumo de leche con bajo contenido graso.
- Reducir el consumo de sal.
- Moderar el consumo de azúcar.
Es importante :
- Comer despacio, masticando bien los alimentos, ya que la primera etapa de la digestión se produce en la boca.
- Consumir los alimentos en horarios establecidos, más o menos cada 4 horas durante el día.
- No comer fuera de las horas de comida.
- No acostarse inmediatamente después de comer. Dejar pasar por lo menos 2 horas.
- Consumir abundante agua (no bebidas azucaradas) entre comidas.
- Comer en cantidades adecuadas de acuerdo a la edad y estado nutritivo de cada persona.
- Aprenda a leer las etiquetas de los alimentos y a reconocer aquellos saludables de los que no lo son.
En esta época de verano, los niños consumen una cantidad no despreciable de helados industriales preparados con un alto porcentaje de grasas saturadas, azúcares y colorantes. Una forma de cambiar la calidad de los nutrientes, sin tener que restringir su consumo, y mejorar el aporte nutricional, es preparar helados caseros licuando leche y fruta natural y poniendo al freezer en envases plásticos con palitos. A los niños con sobrepeso y obesidad es conveniente preparar estos helados con leche descremada . No exagerar las porciones. Una taza de estos helados puede reemplazar la leche de la hora de once.
Todas estas recomendaciones nutricionales unidas a una actividad física normal (equivalente a una caminata diaria de más o menos 20 minutos), evitarán muchas enfermedades catastróficas en el futuro.
Si UD. observa que su hijo está ganando peso rápidamente, no espere a que llegue a ser obeso para consultar.
Recuerde que a mayor edad y a mayor grado de obesidad el tratamiento es más difícil.
Los alimentos, además de influir en el crecimiento y desarrollo de los niños, determinan en forma importante la calidad de vida de las personas.
Una nutrición sana y estilos de vida saludables evitan la obesidad, diabetes, más de la mitad de las muertes por enfermedades cardiovasculares y un tercio de las muertes por cáncer.
Para lograr una nutrición óptima es importante aprender a conocer y seleccionar los alimentos beneficiosos y descartar aquellos dañinos que sólo aportan calorías vacías, y que muchas veces son ofrecidos con atractivas propagandas y premios en los medios de comunicación.
Nuestro país es privilegiado por la variedad de frutas y verduras que produce, pero desgraciadamente no siempre forman parte de la dieta de los niños, siendo reemplazadas por productos industriales con alto porcentaje de grasas saturadas (que aumentan el colesterol), colorantes y preservantes, dañinos para la salud.
Una alimentación sana se basa en una alimentación variada que permita proporcionar al organismo todos los nutrientes en la proporción debida. La proporción ideal corresponde a 25% proteínas, 55% carbohidratos y 20% grasas, además vitaminas y minerales.
Los hidratos de carbono o carbohidratos: Constituyen la mayor fuente de energía, se encuentran en cereales, legumbres, papas, harinas, frutas, azucares refinados, bebidas alcohólicas.
Grasas: Aportan ácidos grasos esenciales y vitaminas liposolubles. Las grasas de origen animal son fuente importante de colesterol. Se encuentran en carnes, leche y derivados, yema de huevo, aceites vegetales.
Proteínas: Aportan a la estructura, permiten el crecimiento, desarrollo y forman parte importante del funcionamiento corporal. Se encuentran en carnes, huevo, leche y derivados, legumbres cereales, hortalizas.
Vitaminas: Son importantes en procesos bioquímicos y ayudan a evitar enfermedades. Si se consumen en exceso también pueden producir alteraciones. Se encuentran en frutas, verduras, legumbres, cereales, pescados, carnes, huevos.
Minerales: Participan en procesos biológicos vitales. Se encuentran en todos los alimentos.
Las recomendaciones para una alimentación saludable incluyen:
- Consumir diferentes tipos de alimentos durante el día.
- Aumentar el consumo de verduras, frutas y legumbres.
- Usar de preferencia aceites vegetales y limitar las grasas de origen animal (presentes en carnes rojas y lácteos).
- Preferir carnes como pescado, pavo o pollo.
- Aumentar el consumo de leche con bajo contenido graso.
- Reducir el consumo de sal.
- Moderar el consumo de azúcar.
Es importante :
- Comer despacio, masticando bien los alimentos, ya que la primera etapa de la digestión se produce en la boca.
- Consumir los alimentos en horarios establecidos, más o menos cada 4 horas durante el día.
- No comer fuera de las horas de comida.
- No acostarse inmediatamente después de comer. Dejar pasar por lo menos 2 horas.
- Consumir abundante agua (no bebidas azucaradas) entre comidas.
- Comer en cantidades adecuadas de acuerdo a la edad y estado nutritivo de cada persona.
- Aprenda a leer las etiquetas de los alimentos y a reconocer aquellos saludables de los que no lo son.
En esta época de verano, los niños consumen una cantidad no despreciable de helados industriales preparados con un alto porcentaje de grasas saturadas, azúcares y colorantes. Una forma de cambiar la calidad de los nutrientes, sin tener que restringir su consumo, y mejorar el aporte nutricional, es preparar helados caseros licuando leche y fruta natural y poniendo al freezer en envases plásticos con palitos. A los niños con sobrepeso y obesidad es conveniente preparar estos helados con leche descremada . No exagerar las porciones. Una taza de estos helados puede reemplazar la leche de la hora de once.
Todas estas recomendaciones nutricionales unidas a una actividad física normal (equivalente a una caminata diaria de más o menos 20 minutos), evitarán muchas enfermedades catastróficas en el futuro.
Si UD. observa que su hijo está ganando peso rápidamente, no espere a que llegue a ser obeso para consultar.
Recuerde que a mayor edad y a mayor grado de obesidad el tratamiento es más difícil.
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